EL ESTADO COMO ORGANIZACIÓN CRIMINAL

En principio podemos definir el concepto general de organización criminal: como una agrupación formada por más de dos personas con carácter estable o por tiempo indefinido, que de manera concertada y coordinada se repartan tareas o funciones con el fin de cometer delitos, así como de llevar a cabo la perpetración ...

Como punto de partida de reflexión en el presente trabajo, tomaremos la palabra del Sr. Presidente de la República realizada con motivo de una entrevista televisiva realizada en Italia .[1]

En la mencionada entrevista el Sr. Presidente Javier Milei, afirmó: “Creo que el Estado es una organización criminal”, a partir de sus dichos nos permitiremos analizar  ésta hipótesis y en todo caso donde reside su “criminalidad “.

La creación de un “estado”, supone la voluntad común de individuos, cercanos en función de sus relaciones  sociales, culturales, económicas, territoriales, históricas, etc. que determinan la necesidad de unirse en un determinado momento histórico, bajo un mismo territorio, una misma bandera y crear una estructura jurídica, reglas de juego, para su organización y funcionamiento, tendiente al bien común.

Ahora bien esa organización estructural de creación normativa debe tener un valor u  objeto lícito, de lo contrario estaríamos ante lo ilícito, por ejemplo un “estado terrorista” o “estado narco”,  bajo esas premisas  de valor se creó nuestra Nación como cita nuestro preámbulo: “... .con el objeto de constituir la unión nacional, afianzar la justicia, consolidar la paz interior, proveer a la defensa común, promover el bienestar general, y asegurar los beneficios de la libertad, para nosotros, para nuestra posteridad, y para todos los hombres del mundo que quieran habitar en el suelo argentino: invocando la protección de Dios, fuente de toda razón y justicia: ordenamos, decretamos y establecemos esta Constitución, para la Nación Argentina “.[2]

Bajo los valores fundantes incluidos en nuestra Constitución Nacional, ,trataremos de analizar el funcionamiento de nuestro estado   a fin de determinar si se cumplen las premisas constitucionales o se han desvirtuado de tal modo que estamos en presencia de una organización criminal, falsamente denominada “estado”.

"La afirmación liberal-libertaria” respecto a la calificación del Estado en forma genérica, nos lleva a la cita del Profesor R. Nozick “El estado mínimo es el único posible” y la calificación de los tributos como una apropiación del trabajo de sus miembros. [3]

Hecha esta reflexión precedente, tratemos de analizar empíricamente lo que ha sucedido y sucede en nuestro país respecto al funcionamiento del Estado tanto a nivel nacional provincial  y municipal.

Tal como lo cita nuestra Constitución Nacional, los  inicios de nuestro estado nacional, surgió de la voluntad de las provincias que deciden crear un estado federal y darse una Constitución como estructura jurídica del mismo, ideada por nuestro Padre fundador el Dr. Juan Bautista Alberdi, allí sintéticamente se establece las bases de funcionamiento del nuevo estado, donde las provincias delegan algunas facultades a los fines de posibilitar la creación del estado nacional. Reteniendo para sí todas las facultades no delegadas. 

Básicamente nuestros Constituyentes fijaron para el nuevo estado los siguientes objetivos precisos : 1.- constituir la unión nacional, 2.- afianzar la justicia, 3.- consolidar la paz interior, 4.- proveer a la defensa común, 5.- promover el bienestar general, y 6.- asegurar los beneficios de la libertad, para nosotros, para nuestra posteridad, y para todos los hombres del mundo que quieran habitar en el suelo argentino:

En la estructura jurídica constitucional se establece el esquema institucional jurídico, político, económico y tributario, tanto para el funcionamiento nacional como el de las provincias y sus municipios.

Debemos lamentablemente decir que la estructura constitucional tanto institucional jurídica, política, económica y tributaria no fue respetada históricamente, por el contrario fue tergiversada, a partir de allí se han creado tanto por el estado nacional, provincial y municipal una estructura política elitista, prebendaria, corporativa,  cuyos negocios siempre estuvieron ligados al “estado” y cuyo brazo armado fue la estructura  tributaria extorsiva   que creó dos economías una “blanca” u oficial y otra “negra” o informal la primera tributa sobre la base de una presión impositiva extorsiva y la otra subsiste en la oscuridad, algunas con ganancias exageradas que no existen en el mundo económico global y otras sumergidas en la indigencia y la precariedad como lo demuestran las cifras de pobreza. 

Dentro de la dinámica descripta la elite política ha instrumentado la “ayuda” vía asistencialismo que  fue convirtiendo en un método electoral que le permitió tener de rehenes a una parte importante de las ciudadanos reduciéndolos a estado de servidumbre tanto económica como política y cultural, provocando un daño incalculable, cuyas repercusiones estamos sufriendo y no conocemos su alcance real y definitivo, basta solo ver el avance del narcotráfico, la delincuencia, las carencias educativas-culturales, en definitiva la miseria en su verdadera expresión que por supuesto no es  pobreza digna. 

Esas circunstancias de carencia de  isonomía[4] construidas a través de años de  desidia extorsiva e ilícita, de generar privilegios y prebendas,  lejos de aspirar al bien común de sus ciudadanos ha significado la decadencia y degradación del Estado democrático que al decir de Tocqueville[5]  debe ser un fino equilibrio entre Libertad  e Igualdad , por ello no debemos confundir la concurrencia regular a votar de los ciudadanos con una verdadera democracia. 

Bastará para aproximarnos a una conclusión final con mostrar el camino de la decadencia  : La transformación de una economía próspera,  pujante, libre, con educación, con salud pública, con garantías constitucionales, con Justicia independiente que nos colocó entre los primeros países de occidente, a la creación de un estado parasitario, extorsivo en materia tributaria, sin garantías  constitucionales, prebendario y corporativo, carente de isonomía,  conducido por una elite política que con diferentes matices no ha sabido, no ha podido o no ha querido romper esa estructura corrupta que provocó y provoca la decadencia argentina.  

Las políticas de subsidios  implementadas luego de la crisis de 2001, que han persistido hasta el presente y que representa una expoliación del patrimonio de los ciudadanos en doble sentido, en principio afirmamos que los subsidios son “impuestos” sacados del esfuerzo tributario de la sociedad; En segundo término cuando se afirma que el estado  “saca“ u   “otorga” subsidios se miente a la sociedad,  porque esos fondos pertenecen a la sociedad, en realidad quien detenta circunstancialmente el Poder ejecutivo y/o legislativo del estado, otorgan o no discrecionalmente dinero público  producto de una arbitrariedad y discrecionalidad  que los ciudadanos no le otorgaron.

Cuando como en el presente o reiteradas veces en el pasado comentamos la suba de Tarifas públicas, manifestando la quita de subsidios que reiteramos son patrimonio de los ciudadanos, cuando esa quita no es producto de una baja proporcional de impuestos para los mismos ciudadanos, sino que además al incrementarse las “tarifas” por ejemplo hasta un  150% también se están incrementando los impuestos que incluyen las facturas por esas tarifas de servicios públicos, que además cuando vamos a un análisis detallado de esas facturas, nos encontramos que incluyen porcentajes para “fondos fiduciarios” o llevan “mochilas” de tasas municipales o impuestos provinciales, lo mismo sucede con los combustibles, los automotores, los impuestos al consumo des de productos para la canasta básica de los alimentos, la auto fijación de los ingresos de los Legisladores, la exención impositiva de algunos sectores, la proliferación de seudo cooperativas manejadas por los “gerentes de la pobreza”, la apropiación de los haberes jubilatorios donde se llega al absurdo de que un empleado de cualquier rango que trabaja en una Caja jubilatoria o asistencial gana mas dinero que sus afiliados que con su patrimonio o miseria pagan sus haberes.  etc. etc.  

Esta apropiación indebida del patrimonio de los integrantes de un estado realizado vía subsidios, fideicomisos sin contralor , inflación, aumento de impuestos disfrazados de “tarifas” representan claramente una conducta típica de una Organización Criminal en los términos enunciados por el Sr. Presidente, por tanto desde nuestra humilde opinión, lo convocamos junto con la voluntad mayoritaria de los ciudadanos a terminar en forma definitiva con la conducta descripta, interpelar y condenar a los responsables de semejante exacción que soporta una parte importante del Pueblo Argentino.  

Dr. Jorge A. Aguirre –  . https://www.estudioagz.com.ar/

[1] entrevista Televisión italiana emitida 12/02/2024 con el periodista   Nicola Porro 

 

[2] Preámbulo de la Constitución Nacional Argentina  1853

[3] R. Nozick  Anarquía Estado y Utopía 1974  Fondo de Cultura Económica y Editorial Innisfree 

 

[4]  isonomía (griego ἰσονομία «igualdad ante la ley

[5] A. de Tocqueville Democracia en América2 Alianza Editorial